Lecciones básicas de seducción

Vamos a aplicar a tu negocio algunos trucos básicos de seducción que podrías emplear fácilmente en una cita. Literalmente, podrás encontrar la mayoría de los consejos en cualquier artículo que hable sobre “cómo conquistar a alguien” o “trucos para enamorar a alguien”, pero hoy vamos a ver cómo se aplicarían estos consejos en el ámbito de la empresa.

Antes de nada, daros una terrible noticia. El amor dura un máximo de 3 años aproximadamente. No lo decimos nosotros, lo dice el Dr. Eduardo Calixto en un artículo de National Geographic. Así que no esperes retener a un cliente fiel para siempre, sólo intenta que el tiempo que hayáis pasado juntos sea un bonito recuerdo y, si es así, es posible que vuelva algún dia.

Recuerda que cada persona es un mundo y un mismo truco puede obtener reacciones distintas según las circunstancias internas y externas de cada individuo en un momento determinado. Sin embargo, existen patrones de comportamiento que puedes seguir y con perseverancia, paciencia y empatía, lograrás conquistar con gran éxito a la persona que deseas.

1. Antes de nada, conócete bien. Pregunta a tus amigos qué es lo más atractivo que hay en ti. ¿Qué es lo que sabes hacer mejor? ¿Qué es lo que te diferencia de tu competencia? Puede que te creas precios@, pero si justo a tu lado hay alguien más bell@ que tú, mejor cámbiate de lugar o destaca otra cualidad. Pregunta a tus clientes qué es lo más atractivo de tu negocio y destácalo. Quizás, la respuesta sea distinta a lo que piensas y descubres una cualidad que te caracteriza y no lo sabes aún.

2. Prepara y estudia el terreno de juego. El momento adecuado es crucial.  No es lo mismo seducir en un bar que en el trabajo. Observa cómo es tu cliente potencial y averigua cuándo es el mejor momento para seducirle y facilita toda la información (buena) sobre ti que puedas por otras vías. El día de San Valentín puede ser un buen momento para enviar un mensaje de consuelo a los solteros o, también, para felicitar a las personas emparejadas.

¡Ah! Y ten por seguro que van a investigar todo sobre ti a través de tus redes sociales. Asegúrate de que hablan bien de ti o, por lo menos, no tengas información dudosa ni engañosa. Al fin y al cabo, terminarán sabiendo la verdad de un modo u otro.

3. El sentido del humor funciona. Puedes reírte de ti y empatizarás mejor con la persona. Pero siempre elige bien lo que dices. Muéstrate seguro de tus inseguridades y, como empresa, puedes ser sincero de los puntos de mejora que tienes pendientes.

4. Si puedes hacerlo, impresiona. No hay nada más sexy que una sorpresa en la primera cita. ¿Sabes hacer magia? ¡Pues adelante con ello! ¿Tienes un regalo? ¡Pues sorpréndele con ello! Por ejemplo, a mi, personalmente como cliente, me hace feliz saber que como nuevo cliente tengo un descuento extra, o que como cliente fiel tengo un regalo.

5. Sonríe, por favor. ¿Conoces las neuronas espejo? Las personas reflejamos muchos comportamientos que asimilamos de nuestro alrededor y esto incluye tanto las emociones positivas como las negativas. Si interactuamos con una persona alegre y optimista, lo más probable es que te transmita su alegría. Por lo tanto, como empresa, muéstrate optimista y sonriente. Por ejemplo, incluir una simple carita soriente en el asunto de tu email, puede crear una impresión positiva a tu cliente potencial.

6. No seas pesad@. Si no observas signos de aceptación por parte de la otra persona tras un intento, no insistas. No hay nada más incómodo que te moleste alguien que no te gusta. Aplica lo mismo en tu empresa. No bombardees con publicidad ni intentes invadir su espacio personal porque crearás un sentimiento de rechazo.